Sarah Fimm | Entrevista
por Javier Martínez

La vida de Sarah Fimm tiene todos los condimentos para sostener las fantasías sobre cómo debe ser la vida de una estrella de la música contemporánea. Sin embargo, no es así la realidad de esta pianista y cantante, nacida en Oklahoma y emigrada a New York en plena efervescencia existencial. Su insistencia en el hacer posible su proyecto musical tiene como fruto seis discos, producidos en su totalidad por Fimm y editados de forma autogestionaria. En esta entrevista para ESTO NO ES UNA REVISTA, recorremos devenires e influencias musicales, la forma de trabajo y el futuro próximo de Sarah Fimm, dueña de una voz formidable y artífice de un trabajo sostenido.

¿Cuándo comenzó tu relación con la música?
Mi madre tocaba el piano desde que tengo uso de razón. Antes de que pueda recordarme a mí misma comiendo, tengo recuerdos de ella tocando. Me contaba historias de cuando era pequeña; vivía en una pequeña habitación con 9 personas y todos los viernes se reunían alrededor de la mesa, vestidos con sus mejores galas, a cantar. Nunca olvidé eso. Es un legado, para mí; una música verdaderamente trascendental, que conocí antes de poder armar un rompecabezas de una manzana Cosa que todavía no puedo hacer muy bien.

¿Qué disco o canción te hizo sentir una dimensión musical diferente o te hizo pensar en ser música?
Probablemente, demasiados para nombrarlos. Tiendo a mirar más al artista en su conjunto que al álbum en particular. Algunos artistas que admiro enormemente son el cantante Maynard James Keenan, el baterista Josh Freese, la cantante Lisa Gerrard, Grace Slick de Jefferson Airplane, Bob Dylan, Beethoven ... Y la lista sigue... Y sigue ....

¿Cuál fue tu primer disco y cómo lo obtuviste?
¡Guau! Si te referís a los primeros discos, los primeros que recuerdo haber oído son Leonard Cohen, Beethoven y Judy Collins. Mi padre solía escucharlos a menudo. Si hablamos del primer cassette que me compré, fue Antrax. Y si el primer CD, creo que fue Peepshow de Miranda Sex Garden.

¿Cómo fue tu formación musical?
Yo realmente no tuve una educación que no sea una educación muy natural, la que me dieron en mi familia, a la que simplemente le encantaba cantar y amaba la música. Mi padre tocaba el acordeón. Las formalidades no entraron en juego hasta que tuve 17 años y me di real cuenta de que quería ir a una escuela de música. Ninguna escuela quería aceptarme ya que tenía un historial de problemas con la autoridad. En esa época, yo andaba dando vueltas en un coche y teniendo una adolescencia turbulenta. Esta experiencia me llevó a la parte inferior de una montaña en Cornwall, Nueva York, donde conocí a mi primer maestro, Franko Richmond. Franko me llevó junto a su esposa Gail, (que por derecho propio es muy inspiradora) y todos los días, durante 12 horas al día, tocaba música; cosa que duró unos 4 meses. Después de este tiempo precioso, en Berklee decidieron aceptarme, gracias a un cassette en el que presenté mi versión en piano de My Funny Valentine y otras pocas canciones más. Fue un milagro. Después de años de ser rechazada y pensando que sería imposible, fui a la universidad y me gradué, cosa que todavía no sé bien cómo fue.

¿Cuáles han sido los músicos más influyentes en tu vida y en tu música?
Si tuviera que elegirlos para cantar serían Maynard James Keenan, Lisa Gerrard, Peter Murphy, Grace Slick y Trent Reznor. Para tocar el piano, Chopin, Schumann, Rachmaninov, Bartok, Bach, Beethoven, Debussy, Vivaldi ... ... y siguen los nombres... Para la producción, Brian Eno, Daniel Lanois y David Baron. Y si tuviera que elegirlos por su inteligencia, Ani DeFranco y Loreena McKennitt.

¿Cómo componés tus canciones?
Cada álbum es un proceso diferente. Algunos de los registros sonoros, que son más electrónicos, son los que producimos David Baron y yo en una habitación con un montón de viejos sintetizadores analógicos. Alguna de la música más actual, como por ejemplo el séptimo álbum que está por salir a la calle, se basa más en tocar en vivo y reunir a grandes músicos en un solo lugar y producir la explosión.

¿Cómo construís un disco?
Para ser honesta, ni siquiera estoy segura de saberlo. Acabo elegiendo las canciones que siento que me llenan por dentro y espero que sea una experiencia que rebote por todos lados.

¿Escuchás música cuando estás componiendo o grabando?
No, no realmente. Mi cerebro es en general un lugar muy atronador si estoy en mi espacio creativo. En el tiempo entre dos cosas por hacer o en la cena, puede ser tener esa perspectiva. Cuando grabo, por lo general estoy muy preocupada y atenta a todo lo que ocurre así sean sonidos que se producen en el entorno externo.

Tu música es muy ecléctica, un vitraux de sonidos y texturas musicales. ¿Cómo definirías tu estilo?
Trato de no buscarle definiciones. Por lo general, tienden a ser insuficientes para lo que tratan de definir. Estoy feliz de permitir que otros lo definan de la forma que les plazca.

¿Cómo ves el panorama musical de hoy?
Creo que es esencial para los artistas sentirse capaces de hacer; compartir nuestras experiencias y nuestros conocimientos para poder ayudarnos mutuamente a construir una mejor plataforma para sostener nuestra música. Hay una enorme cantidad de trabajo por hacer para lograr ese objetivo.

¿Cuáles son los puntos fuertes de sus presentaciones en vivo?
Creo que los shows en vivo son siempre una experiencia única. No importa si estás en el umbral de una puerta, en la cárcel o un teatro. Cada momento tiene su magia para ofrecer.

¿En qué trabajás en este momento?
Ahora mismo estoy trabajando en unas cuántas cosas. Lo primero es un proyecto llamado Karma Phala Music Project. El Karma Phala es un soporte digital de 1 Gb de capacidad que contiene 31 temas musicales, fotos, vídeo, un mensaje personal, y mucho más. El objetivo es fomentar un clima de intercambio y apoyo entre artistas y oyentes. Luego, en una de las obras que después de mucho tiempo está llegando a su finalización: un nuevo álbum titulado Near Infinite Possibility, el cual tengo la esperanza de editar en la primavera de 2011. El adelanto va a ser el video de la canción Yellow que, en breve, estará disponible en mi página de artista del sitio CDBaby y en mi sitio personal. En el nuevo disco colaboraron músicos como Peter Murphy, David Baron, John Andrews, Josh Freese, Paul Bushnell, Earl Slick, Danny Blume, Jane Scarpantoni y mucho más. Hay mucho que hacer en este mundo y, en el corto plazo, no tengo planes de frenar... ¡Ni siquiera de bajar la velocidad!